Esta receta de salsa para enchiladas es audaz, ahumada y muy fácil de hacer. A diferencia de las versiones compradas en la tienda, esta salsa casera se elabora con ingredientes reales, sin conservantes, y está lista en solo 15 minutos. Ya sea que estés preparando enchiladas, burritos o tacos, ¡esta salsa aporta un sabor de calidad en restaurante a tu cocina!
Si solo has probado salsa para enchiladas de una lata, ¡te espera un gran placer! Hacer salsa roja para enchiladas casera es muy fácil con ingredientes básicos como tomates asados a la leña y algunas especias cálidas; y una vez que pruebes la diferencia, no querrás volver a atrás. Esta versión es rica, ahumada y lista en menos de 20 minutos. Es perfecta para enchiladas, burritos, cazuelas y cualquier otra cosa que necesite un poco más de sabor.
¿Por qué hacer salsa para enchiladas desde cero?
Hay algo realmente especial en las salsas caseras: sin conservantes, sin azúcares añadidos y con control total sobre el sabor. Esta salsa roja para enchiladas casera sabe más fresca, más audaz y más equilibrada que cualquier cosa que puedas encontrar en una lata, además es más fácil de hacer de lo que piensas. Consejo Profesional: Haz un doble lote y congela la mitad. Tu yo del futuro te lo agradecerá la próxima vez que surja una emergencia de noche de tacos.
Ingredientes de la receta
Aquí tienes todo lo que necesitas para hacer esta salsa para enchiladas desde cero:
- Harina de trigo: Ayuda a espesar la salsa hasta alcanzar la consistencia sedosa perfecta.
- ACEITE vegetal: Forma la base de tu roux y transporta todas las especias.
- Tomates asados a la leña (400 g): Añaden un sabor rico y ligeramente ahumado con un toque de dulzura natural.
- Caldo de pollo: Usar un caldo de buena calidad hace una gran diferencia. Añade un sabor más profundo y rico a la salsa y realmente junta todas las especias.
- Orégano seco: Añade una nota clásica y terrosa.
- Azúcar moreno claro: Equilibra los sabores ahumados y picantes con un toque de dulzura.
- Comino molido: Aporta una profundidad cálida y ahumada.
- Páprika: Añade color y un suave toque picante.
- Polvo de ajo y polvo de cebolla: Capas saladas de sabor sin la molestia de picar.

Instrucciones paso a paso
Esta salsa para enchiladas se prepara rápidamente con solo algunos pasos básicos. Necesitarás un procesador de alimentos o una licuadora para obtener los tomates en una textura sedosa, pero el resto se hace en una sola cacerola en la estufa.
Paso uno: Mezclar los tomates – Agrega los tomates en cubos asados a la leña a un procesador de alimentos o licuadora. Mezcla hasta que esté completamente suave y reserva.

Paso dos: Mezclar las especias para enchiladas – En un tazón pequeño, combina el orégano seco, azúcar moreno, comino, páprika, polvo de ajo y polvo de cebolla. Revuelve hasta que esté todo bien mezclado.

Paso tres: Cocinar el roux y las especias – En una cacerola mediana a fuego medio, calienta el aceite vegetal. Agrega gradualmente la mezcla de harina y especias, batiendo constantemente hasta que esté suave y fragante, aproximadamente de 1 a 2 minutos.

Paso cuatro: Agregar los tomates y el caldo – Vierte lentamente los tomates mezclados y el caldo de pollo, batiendo continuamente para mantener la salsa suave.
Paso cinco: Cocinar a fuego lento y espesar – Aumenta el fuego a medio-alto y lleva la salsa a un suave hervor. Una vez que esté hirviendo, reduce el fuego a bajo y deja cocer durante unos 10 minutos, batiendo ocasionalmente, hasta que espese y los sabores se hayan integrado.

Preguntas frecuentes
Cocinarla a fuego lento por más tiempo suele ser la solución. Si necesitas una solución rápida, mezcla 1 cucharadita de maicena con 2 cucharaditas de agua fría y añádelo a la salsa.
¡Absolutamente! Esta receta utiliza tomates asados a la leña en lugar de pasta de tomate para un sabor más fresco y vibrante.
La salsa para enchiladas suele ser más líquida, tiene un sabor más profundo y está diseñada para ser horneada en platos. La salsa para tacos es más espesa, más dulce y se usa más como un condimento.
Consejos y trucos de expertos
- Usa tomates asados a la leña: Añaden una profundidad extra y una dulzura natural que no puedes obtener de los tomates enlatados normales.
- Activa tus especias: Cocinar las especias en aceite primero “activa” su sabor; un truco fácil en la cocina que resalta mucho más el sabor.
- Cocinar a fuego lento: Dejar que la salsa espese lentamente te dará la mejor textura. Una vez apresuré el paso de cocinar a fuego lento cuando tenía prisa; la salsa aún sabía bien, pero darle los 10 minutos completos marcó una gran diferencia en lo rica y equilibrada que sabía.
- Congelar porciones: Congela la salsa en porciones de 250 ml para que puedas tomar exactamente lo que necesitas para una cena rápida, ¡sin descongelar un gran lote!
Variaciones para probar
- Sabor más ahumado: Añade una pizca de páprika ahumada o polvo de chipotle a la mezcla de especias.
- Salsa más picante: Añade un toque de pimienta de cayena o un chipotle finamente picado en adobo.
- Vegetariana/Vegana: Sustituye el caldo de pollo por caldo de verduras.
- Sin gluten: Usa una mezcla de harina sin gluten en lugar de harina de trigo.

Formas de usar la salsa para enchiladas
Independientemente de cómo la prepares, la salsa para enchiladas es increíblemente versátil. No solo es para enchiladas (aunque es increíble en mis enchiladas de carne). Aquí hay algunas formas más de usarla:
- Baño de burritos para darles un extra de sabor
- Incorporarla en una cazuela mexicana con queso
- Verter sobre huevos revueltos o un “hash” para el desayuno
- Incorporarla en bowls de arroz con tacos
Cómo almacenar, congelar y recalentar la salsa para enchiladas
- Almacenar: Transfiere la salsa enfriada a un recipiente hermético y refrigera hasta por 1 semana.
- Congelar: Vierte la salsa enfriada en bolsas o recipientes aptos para congelar. Congela hasta por 3 meses.
- Recalentar: Calienta suavemente a fuego bajo en la estufa, revolviendo ocasionalmente hasta que esté suave y caliente.
Una vez que pruebes a hacerla desde cero con tomates asados a la leña y especias reales, nunca más volverás a la versión enlatada. Ya sea que estés preparando enchiladas, burritos, cazuelas o simplemente agregando un toque especial a la noche de tacos, esta salsa es un cambio total de juego. ¡Espero que la pruebes!
Esta receta fue destacada como la Receta de la Semana en el Winnipeg Sun, junto con algunos consejos sobre cuándo usar hierbas frescas frente a hierbas secas. Si deseas echar un vistazo, puedes leer la columna completa aquí.
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Receta de Salsa para Enchiladas
Ingredientes
Salsa para Enchiladas
- 2 cucharadas harina de trigo
- 60 ml aceite vegetal
- 1 lata de 400 g tomates asados a la leña
- 300 ml caldo de pollo
Especias para Salsa de Enchiladas
- 1 cucharada orégano seco
- 1 cucharada azúcar moreno claro
- 2 cucharaditas comino molido
- 2 cucharaditas páprika
- 1 cucharadita ajo en polvo
- 1 cucharadita cebolla en polvo
Instrucciones
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Mezclar los tomates: Coloca los tomates en cubos en un procesador de alimentos y mezcla hasta que estén extremadamente suaves.
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Mezclar las especias para enchiladas: En un tazón pequeño, combina todas las especias para la salsa de enchiladas hasta que estén bien mezcladas.
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Cocinar el roux y las especias: Calienta el aceite en una cacerola a fuego medio. Agrega gradualmente la mezcla de harina y especias, batiendo hasta que esté suave y sin grumos.
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Agregar los tomates y el caldo: Vierte lentamente los tomates mezclados y el caldo de pollo mientras bates continuamente hasta que se combine. Aumenta el fuego a medio-alto y lleva la mezcla a un hervor. Una vez que esté hirviendo, reduce el fuego a bajo y deja hervir suavemente durante 10 minutos, batiendo ocasionalmente, hasta que los sabores se integren.
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Usar o almacenar la salsa: Usa la salsa inmediatamente en tu receta, o transfiérela a un recipiente hermético y refrigera hasta por 1 semana. También se congela bien para almacenamiento más prolongado.